Día XV. 12.11.2015: Burgos > Burgos (OKm); de burgos a Burgos y tiro porque me toca.

  La gente optó por pasar un segundo día en Burgos, con el propósito de hacer un alto en el camino,...y por qué no decirlo, descansar un poco. Estimo, que es perder un día de caminata (si pensamos en lo que tenemos por delante), y que deberíamos aprovechar este anticiclón que conlleva  ese buen tiempo que nos acompaña. No obstante, veamos el vaso medio lleno, y pensemos, que tal vez, nuestras piernas lo agradecerán.

   Burgos es otro de esos destinos ideales para establecer el fin de su Camino de Santiago de muchas Almas Errantes que lo comienzan en Saint Jean Pied de Port o Roncesvalles. Por contra, son los menos las personas que deciden pasar una semana en el Camino para hacer el tramo Burgo-León. Algo, que pienso, debe de estar relacionado con el paisaje que nos encontraremos por ahí delante...ya se verá.

   Una vez seguro de que mi equipaje había salido de vuelta a casa correctamente, y prestar mis servicios de fisioterapeuta a Su, o mejor dicho, a sus perjudicadas piernas y espalda, salimos a conocer la ciudad.



Catedral Santa María de Burgos.

  En cierta ocasión, escuché decir al arquitecto y humanista José Mª Pérez Peridis que, antiguamente las catedrales se planteaban como si de un centro comercial  se tratara. Eran el lugar donde acudía la gente de visita en multitudes. Así, que ahí está, la Catedral de Santa María de Burgos, un templo que, según consta, se empezó a construir alrededor del año 1221. Se considera de estilo gótico, aunque presenta rasgos que la identifican con el estilo renacentista y barroco. Dadas las gélidas temperaturas que la ciudad castellana alcanza, especialmente en invierno, se planteó (hace unos años), dotarla de un sistema de calefacción; pero la alteración de la estética del edificio llevaba consigo la posible pérdida de su reconocimiento de Patrimonio de la Humanidad, otorgado por la UNESCO, por lo que a los fieles, no les quedaría otra que acudir a sus celebraciones eclesiásticas de invierno con un buen abrigo.

Casa del Cordón, Burgos.

  Fue a esta Casa del Cordón , el lugar al que se dirigió un tal Cristóbal Colón (año 1497), para que los Reyes Católicos le prestaran algo de dinero para financiar un crucero con un destino que, presumiblemente, él ya conocía: Las Indias. Cuando le expliqué a Roy esta pequeña curiosidad de la historia, y dada su identidad americana, no dudó en hacerse una foto con este monumento de fondo. 

Paseo del Espolón, Burgos.

 Aprovechando el día primaveral que nos brindó nuevamente este otoño, nada mejor que tirar de supermercado y pillar algo de picoteo, para improvisar un picnic a orillas del río Artazón y, de paso, sobre la hierba de  ese paseo del Espolón de la capital burgalesa, tomar un poco el sol y disfrutar de su entorno.

  

"Hombre leyendo el periódico",
en Plaza Mayor.

    A lo largo de las calles y plazas de Burgos, es habitual encontrarse con diversas esculturas adornando sus calles, como es el caso de este "Hombre leyendo el periódico", en homenaje a los medios de comunicación, que se encuentra en los soportales de la Plaza Mayor, con la inestimable colaboración de Su.

          Plaza de Santa María.    

   Por la mañana, pateamos la ciudad y después volvimos al hotel para recoger nuestras cosas y acudir al albergue parroquial de Burgos, el lugar donde pernoctaríamos hoy. Roy, que se había alojado ayer, tuvo que salir para volver a entrar. Aunque sorprenda la acción, es norma de la mayoría de albergues municipales, es decir, si optas por hacer más de una  noche, es obligatorio abandonarlos antes de las ocho de la mañana, para volver a entrar cuando abren de nuevo sus puertas al público. Puede parecer algo incongruente, pero de ahí su económico precio. 

Albergue Parroquial Emaús , San Pedro de Cardeña 31.
 947 25 28 51 Burgos.

El albergue parroquial de peregrinos Emaús de Burgos es un lugar, por lo que pude comprobar, que debe de haber sido rehabilitado hace pocos años por que, aparentemente, da una sensación de nuevo. Con respecto a sus instalaciones y a pesar de que estábamos bastante gente ocupando sus literas, lo encontré limpio y confortable;...vamos, que muy recomendable. Por no hablar de su situación estratégica, a unos metros de la catedral, y lo más imprescindible, la Plaza Mayor y todas las cervecerías en torno a ella. Y ahora, si le sumamos el hecho de que Burgos es un punto de principio y fin para muchos caminantes, convierten al albergue en un lugar con una energía y carisma especial; eso que se define como "vidilla". Ahí lo dejo, recomendable.

Cervecería "El Morito", en Calle diego Porcelos 1.

  Para cerrar la jornada, no hubo mejor opción que seguir los consejos de mi amigo Alberto y terminar tomando unas Suelas típicas de Burgos, en "El Morito"; según él, el mejor bar de tapas de la ciudad. Fue una cena entrañable, entre otras cosas, porque Tim, ese "Gentleman" de Bristol (con el que veníamos coincidiendo últimamente) daba por concluido allí su Camino;...otra fatídica despedida. Es la cara amarga de esta ruta jacobea.

                         







                                                       


Florian Hain, Frankfurt, Alemania.

  Florian es un chico de Frankfourt, Alemania, que huyendo del estrés que le ocasionaban los tratados de economía y la estadística, aparcó sus estudios y se vino al Camino, con el fin de encontrar cierta tranquilidad en su vida. Hoy, al llegar al albergue, lo encontré en su puerta  calzando  unas chanclas. Al parecer, lleva sus pies un tanto hechos polvo, y ,por su forma de andar, veremos hasta cuando pueden dar de si. Le he conocido directamente esta tarde, cuando sin saber cómo ni porqué, al entrar en un bar, puso una cerveza en mi mano. Lo curioso del tema, es que visionando fotos de hace unos días, ya habíamos coincidido en algún que otro sitio, pero todavía no me había percatado de su presencia. En cualquier caso, y aguanten lo que aguanten sus pies, Florian es un tipo que rompe totalmente el estereotipo, ése que tenemos predispuesto del carácter germano, pues es súper extrovertido y  siempre está con la sonrisa en su boca.

 

  Seguiremos hablando.